martes, abril 28, 2009

Y ahora, estoy en blanco.
En la maceta que es mi cabeza, está la tierra, la humedad y la semillita de una historia. Aún no se le ve el brote.

Alta en el cielo (raso) miro los libros que vienen hacia mí (como sánguches de miga) y los dividís. Me quemé, me corté, me agarré el dedo gordo.

Cuánto tiempo de reencuentros!!!

Qué maravillosos son los descubrimientos fortuitos.

3 comentarios:

  1. Gracias, GC!!!!!!!!!!!
    Qué milagro uqe viene por acá, no gustaría pasar a tomar una tacita de café???


    Grande, GC!!!!

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