domingo, septiembre 25, 2005

puntapié

Es cierto: el tiempo está ahí y espera. Yo digo basta. Y ya dije basta. Este es mi punto de inflexión. Tras mis bodas de plata conmigo es tiempo de replantear esta relación. No puedo seguir si no nos cuido, si no elegimos qué me hace bien y qué no. Hasta acá llegamos de esta manera. Comienza el momento de la aventura en sí y sin más preámbulos. La hora de las apuestas fuertes. Probar, perder, ganar, empatar y seguir hacia donde me lleve la ondulación de mi energía. De lo que tengo uqe hacer de las experiencias que tengo que pasar, lo que me toca aprender... Soy yo conmigo en completo desprendimiento de todo y sin embargo, guiada por los deseos. Me entrego a mí misma. Me celebro y me canto. Y porque me celebro también te celebro y te canto. Porque tú y yo somos la misma cosa.
Continúo mi camino dejando atrás las cosas que quedaron atrás, las partes de mí uqe quedaron atrás. Y esto no es literatura, no. Harta de las mil y una pajas poéticas que enroscan, encarajinan, que cierran y no abren. Que no son claras, que no se manifiestan desde raíz. Literatura en su punto justo. No podemos hacer poética de pedacitos de corazón, o de alma, o de espíritu. Eso se siente y no se puede manifestar en palabras que le quedan chicas.
Soy más que palabras que representan ideas. Soy acciones, soy vagabundeo vacío de expectativas. Desearía no desear. Desearía no esperar nada. Y lo hago mientras puedo.
Soy mi prueba y error, soy mi propio camino y aún más. Soy esa esencia que ve con ojos de colores, lo que comúnmente la gente ve en blanco y negro.
Me cansaron los silencios impuestos por histerias ajenas. Me cansé de que me tomaran por idiota e insensible cuando no lo soy (en todo caso, que me haga, no significa que lo sea y eso lo ve Mr. Magoo a la legua). Me cansé del agrado al otro. Soy jodida explícitamente, que es la mejor forma de ser jodido. Soy gruñona, huraña, irritable y enroscada. Tengo mal humor y soy insegura. Primero la fidelidad a mí misma. Y principalmente, mi cuidado. Yo me cuido y me protejo.
Ya estoy cansada del pelotudeo.

2 comentarios:

  1. ¿Comienza un parto de vida-vivida o una muerte escritural, srita.?
    Lo segundo casi que no se lo deseo ni al más jodido, qué podés ser vos a veces, si te decidis.

    ResponderBorrar
  2. No, sí, sí... Nadie más que Ud. se le anima a estos posts... Post... post... claro... parto vivencial, casi siempre opto por la vida (excepto cuando opto por su contracara). Praxis vital. Pura praxis vital, a pesar de mis regodeos melodramáticos.

    Srta. ?

    ResponderBorrar