Napolitano

En relación a lo antes posteado, he llegado al estado "helado napolitano".
Esto implica una relación cromática epitelial, donde el el rojo de mayor exposición solar es el sabor frutilla. El color levemente tostado sería el chocolate (de mala calidad, poruqe todavía es muy claro), que aparece como testigo delator de diferentes tipos de biquini. Para finalizar, el púdico blancuzco, la inmaculada porción de vainilla que quedará para siempre vedada a las beldades del sol.

Finalmente, hoy lo hice. Y como resultado la vi. Gigante, grande, enorme. Enorme! Enorme! Enorme! Me miraba del otro lado del espejo. Grandiosa en todo su esplendor. Me miraba a los ojos. Colmaba el campo visual, mi campo visual.
Pero a nadie le importó excepto a mí. A pocos le importa.
De cualquier manera yo siempre la voy a ver enorme enorme enorme!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Prueba III

El sol de la tarde no quema como el sol de la mañana. De hecho, el sol de la tarde no quema at all.

Prueba II

Hoy realicé mi experimento con un añejo protector solar. La conclusión a la que llegué fue que el protector añejo factor 35 actúa como un protector factor 35 común, al menos de 11 a 12:15 hs.
El nivel de sol es de 3.

Prueba

Hoy hice mi primera prueba de sol.
Y el resultado fue positivo, del ombligo hacia abajo, en un tono moderado de rojo passión, del ombligo hacia arriba, un alcance leve del astro rey debido a la pequeña capa de protector factor 8, y de la parte de arriba de la biquini en adelante en dirección ascendente, impertérita, vaya a saber uno por qué.

Dos cortitos y uno con promesa de yapa

Aunque las promesas termino sin cumplirlas (no todas).
Pero me dí cuenta que si me saben llevar soy muy dócil. Y/o si me tratan bien.
Cuando no es así, me manifiesto de maneras más o menos dañinas para conmigo, dentro de los márgenes de la ley. Nunca fuera de ella.
Siempre he dicho que tengo mimotropismo positivo.

Al confudirlo con otra persona, me di cuenta que no importaba quién fueras de la familia. Odiaría al primero de ustedes que se me cruce. Con o sin fundamento. Son todos iguales al odio de mis entrañas.

Encontré una almohadilla gastada que empecé a usar. Pero he llegado a la conclusión de que no se compara ni por las tapas (quiero el origen de esta frase. Y sí, te estoy señalando a vos) con el leve babor, escupitajo o lambeteada personal que esw infalible ante la separación de cualquier tipo de papel.

Mellow

Los domingos a la noche me encuentran últimamente con un humor particular. El domingo a la noche es el momento uqe tengo en la semana para amar. Amo en toda dirección: arriba, abajo, de costado y en diagonoal. Amo en pasado, en presente y en futuro. Con el corazón roto, con el corazón pleno, con el corazón incierto. Amo, y no me importa. Y no me sonrojo. Tanto, que quisiera repartir besitos en la frente, abrazos de doblecorazónlatiendo. Y soy más rosita que otros días a la semana. Será porque la pila de la Luz se carga el viernes, con suerte, el sábado. Y el domingo brilla en toda su intensidad. Y hasta a veces alcanza para lumbrar toda la semana.

Hay miles de comentarios que podría hacer respecto de esta canción y que no me los permito. Tampoco podría discernir entre los que querría y no querría compartir.
Así que va caminando sola hacia sus ojos. Ojalá que mientras la leen, algún chispazo rosa se dispare en su Luz. Si no, yo tengo de sobra.


Todo Se Transforma, Jorge Drexler

Tu beso se hizo calor,
luego el calor, movimiento,
luego gota de sudor
que se hizo vapor, luego viento
que en un rincón de La Rioja
movió el aspa de un molino
mientras se pisaba el vino
que bebió tu boca roja.

Tu boca roja en la mía,
la copa que gira en mi mano,
y mientras el vino caía
supe que de algún lejano
rincón de otra galaxia,
el amor que me darías,
transformado, volvería
un día a darte las gracias.

Cada uno da lo que recibe
y luego recibe lo que da,
nada es más simple,
no hay otra norma:
nada se pierde,
todo se transforma.

El vino que pagué yo,
con aquel euro italiano
que había estado en un vagón
antes de estar en mi mano,
y antes de eso en Torino,
y antes de Torino, en Prato,
donde hicieron mi zapato
sobre el que caería el vino.

Zapato que en unas horas
buscaré bajo tu cama
con las luces de la aurora,
junto a tus sandalias planas
que compraste aquella vez
en Salvador de Bahía,
donde a otro diste el amor
que hoy yo te devolvería......

Cada uno da lo que recibe
y luego recibe lo que da,
nada es más simple,
no hay otra norma:
nada se pierde,
todo se transforma.

Moño

A mí los regalos me gustan mucho. Y me encantan con moño. Así como los besos con música de violines y humo. Como las miradas en primerísimo primer plano en un juego de cartas, los postres con cereza arriba, el ruido perfectamente ahuecado del "choquesoscinco", los helados que dejan bigote, el cigarrillo (ahora autonegado) después de una buena comida, el "muy bien felicitado" después del 10 (o del aprobado), el buen almuerzo del domingo, el spot sobre el monologuista, el beso de chau.

Una vez más, mi escote me antecede, y yo, que estoy con la guarrada a flor de piel, la dejo ver entre los dientes. Y el dolor de cabeza, -que como el frío-, no se va. Y otra vez con las piernas y la cola que me pesan más que antes. "porque ayer corriste", dirán algunos. Yo sé que es porque hoy tengo que rendir, finalmente. Y agradezco que no me dieran el día en el laburo, porque si no, me quedaría rezumando en mi casa, pensando en dires y diretes acerca de mi futuro académico, vocacional, ocupacional, sentimental, económico, social, etc etc etc.
Agradezco hoy, una vez más, por este blog orgíaco y por tener trabajo.

No vale

Vale?
Vale que la garganta se anude muy a posteriori después de que todo caducó?
Vale emocionarse por palabras seguramente ajenas con destinatarios ajenos que imagino propias? (Esa flor no es para mi jarrón!)
Vale pensar en algún imaginario exposiblefuturoenunmundoparalelo cuando el presente y el futuro cercano son tan reales y tangibles, que tienden a ordenarse alrededor de pilitas de libros y papeles?
Vale hacer trampa y escribir sin describir, leer sin leer, sin querer ser leído y quererlo?
Vale algo de tristeza por un impuesto NO puesto a buen término?

Igual, yo no me peino: me parece que en esta foto no salgo.

Estas palabras no valen.

Talón de Aquiles

Mi talón de Aquiles es el lenguaje.
Cuando se meten con mis palabras, ya tenemos un problema. Y nunca más -lo quiera yo o no- se puede salir de ahí. Porque mi lenguaje, a diferencia de mi alma, de mi espíritu, es muy posesivo.
Tengo un sistema lingüístico parecido a una planta carnívora, uqe atrapa, aprehende y no quiere dejar salir. Y no se libera ni libera.
Las palabras son mías, son las siete llaves de acceso a mi mundo, a mi alma y a mi corazón.
Y no epor supuesto, no son Panzer. Ni siquiera computarizadas.

O sí?

En el agua

Exactamente ahí: yo en el agua. Entre el H2 y el O estaba yo placiente, abandonándome, entrando en ese trance acuático del sonido de los mundos. Y allí había una licuadora que mostraba la potencia de dos de sus velocidades. Ahí, en algún otro lugar de la casa o el edificio. Ahí, en cualquiera de las dimensiones (im)posibles. Más lejos y más cerca el clop de la gota gorda que se lanza hacia la multitud. El constante ritmo de la radio, apagado. Una brisa ajena me iluminó de temores de que me vieran tan ida, tan enaguas, tan expuesta. Y una gota en la entrepierna sugirió aún más esa posibilidad, así que detuve las oleadas de sensualidad preadolescente y volví a la superficie.
La cabeza adentro y la nariz -esnorquel anatómico- afuera.
Aún me quedaba algo más.
Experimenté el borroso mundo de los colores, entre las disueltas sales naranjas y mi propia miopía anfibia, navegando mis ojos desnudos por la viscosidad líquida, invitándolos a conocer otro de esos otros mundos.